Me he ventilado este libro en dos sentadas y es que me ha parecido muy fácil de leer, ameno y con una escritura muy fresca.
Un mundo entre lo real y lo imaginario donde confundes la vida de Nata y Fortunata Fortuna, de Beto y de Mauro Monreal, de los amigos Carlota, Rita, Alvar y Blas, del jefe Donato y sus chicas
... y donde un montón de circunstancias son familiares (la crisis, el Whatsapp, los despidos masivos...).
Nada más abrirlo ya me gustó el libro por su manera de empezar que os voy a compartir:
La vida es una mierda. Que yo no digo siempre, digo ahora. Que yo no
digo que la vida sea una mierda desde que nací, yo digo estos días,
estas semanas, estos meses. Estos en los que abro la ventana por las
mañanas y me da igual si el pruno que hay enfrente está florido o se ha
podrido.
Y unas cuantas frases, pinceladas aquí y allá que me gustaron:
- La diferencia es que sabes que alguien te quiere no porque te lo diga, sino porque te lo hace sentir.
- Me gustaría borrar todos los «Mejor no» y escribir «Reserva en cualquier sitio a las diez», porque seguro que habría podido estar en cualquier sitio a las diez.
- Es asombroso cómo algunas personas saben lo que ocurre sin que tú tengas que decir nada.
- Me pregunto qué es más verdad, ¿lo que la gente ve por fuera o lo que yo siento por dentro?
- No es fácil que alguien consiga removerte el corazón cuando lo tienes a prueba de bombas atómicas.
- Antes de salir de casa he batido un poco de detergente con agua y me he
hecho una pompa de jabón para ir a currar. Me he metido dentro, he
puesto la canción de Mauro, he volado por encima de todos los edificios,
he atravesado el paseo de la Castellana y, como iba bien de tiempo, me
he desviado para volar un rato por el Jardín Botánico. Nada es comparable a la panorámica que te da del mundo una burbuja de jabón.
- Es lo que tiene empezar a enamorarse, que una cree que el mundo está envuelto en un absurdo papel de celofán.
- Esta noche he llegado al final del libro que me regaló cuando estábamos juntos. La última frase dice: «Ten cuidado con lo que sueñas, porque podría cumplirse.» Y después pone: «Y lo que temes, también.»